El centro-sur de Chile se encuentra plasmado por numerosos Parques Nacionales y Reservas naturales en donde vírgenes bosques, cristalinos lagos y ríos, relajantes termas naturales, y magníficos volcanes sorprenden con su potente belleza y desplante.
Destacan así actividades como el turismo rural, la pesca con mosca, la observación de flora y fauna; además de deportes de aventura como el rafting, kayak, esquí, trekking, cabalgata, y montañismo.
El turismo sustentable y la conservación de especies nativas juegan también un rol protagónico, destacando grandes iniciativas como la reserva biológica Huilo-Huilo, proyecto único en el mundo por su compromiso con la conservación del patrimonio natural y cultura local.
Esta región atrae también a los turistas por su peculiar combinación de las culturas Mapuche, Española y Alemana, reflejando sus influencias en fiestas, comidas, y costumbres.
Entre los sitios más notables podemos destacar: el Parque Nacional Conguillio inserto entre bosques de Araucarias y Coihues milenarios; el Parque Nacional Villarrica surcado por su majestuoso volcán, uno de los más activos de Sudamérica; las Termas Geométricas, pozones de aguas caliente tallados en la naturaleza virgen; la reserva biológica Huilo-Huilo, enclavada en el corazón de la Selva Patagónica; el Lago de Todos los Santos con sus impactantes aguas color esmeralda y vista a los imponentes volcanes Osorno, Puntiagudo y Tronador; y la región de Cochamó, paraíso de los aventureros y amantes de la escalada en roca.
Ciudades como Pucón a los pies del volcán Villarrica, y Puerto Varas a orillas del lago Llanquihue, ofrecen una excelente y variada infraestructura hotelera y gastronómica. Ambas con típica arquitectura andino-patagónica, se convierten en puntos claves para recorrer los diversos atractivos de esta región.